martes, 20 de marzo de 2012

Los sólidos platónicos son poliedros convexos cuyas caras son polígonos regulares iguales y en cuyos vértices se unen el mismo número de caras. Reciben este nombre en honor al filósofo griego Platón (ca427 adC/428 adC – 347 adC), a quien se atribuye haberlos estudiado en primera instancia. También se conocen como cuerpos platónicoscuerpos cósmicossólidos pitagóricossólidos perfectos,poliedros de Platón o, con más precisión, poliedros regulares convexos 
 
Los sólidos platónicos son el tetraedro, el cubo (o hexaedro regular), el octaedro, el dodecaedro y el icosaedro. Esta lista es exhaustiva, ya que es imposible construir otro sólido diferente de los anteriores que cumpla todas las propiedades exigidas, es decir, convexidad y regularidad. 

 
















El origen de los sólidos platónicos como elemento para ser


estudiado por las matemáticas se halla sin duda, en la antigua Grecia. Son
los griegos quienes por primera vez entienden que esos poliedros han de
ser estudiados. Sin embargo para que cualquier cultura se plantee
estudiar  algo en un determinado momento de su historia, tienen que
conocerlo con anterioridad, e incluso, con mucha anterioridad. Y este es,
en concreto, el caso de los sólidos platónicos.